Actualmente en plena Cuarta Revolución Industrial, es tendencia mundial plantearse la integración de la tecnología inteligente en el mundo de la fabricación.
Son muchas las empresas que están perdiendo esta oportunidad. La Industria 4.0 es un cambio de paradigma no solo para cómo conocíamos la fabricación, sino también para la analítica de datos.
Las tecnologías inteligentes, y más concretamente, el aprendizaje automático, permite obtener información procesable a partir de los datos que se recogen. Datos tangibles sobre el aumento de la eficiencia o la reducción de emisiones.
Las fábricas de hoy cuentan con sensores que recopilan infinidad de datos. La mayor parte de las empresas recogen estos datos, pero pocos los utilizan para realizar análisis.
Las empresas tradicionales siguen entregándose a herramientas de análisis arcaicas. Imagina una fábrica que localiza un contratiempo con uno de sus productos o procesos, pero no puede descubrir la causa. Desde el método tradicional, habría que plantear una hipótesis y realizar un análisis que puede llevar meses para arrojar resultados.
No Comments